Durante la etapa de la lactancia, es importante
preocuparse tanto por la salud y el buen desarrollo del bebé, como de la madre.
Para la cual, es suficiente una dieta balanceada y equilibrada.
Conductas y hábitos alimentarios positivos.
Ingestión de agua adecuada: es habitual tener más sed de
lo normal, por lo que es conveniente beber agua cada vez que se tenga sed. Es
un buen hábito llevar un vaso de agua cuando se da de amamantar, debido a
que es un momento en el que se suele tener mucha sed.
Comer variado: al igual que en todos los casos es
necesario comer de una gran variedad de alimentos para cumplir con los
requisitos nutrimentales que el organismo demanda, para la madre y para el
bebé.
Comer cuando se tenga hambre. Es frecuente sentir más
hambre de la normal, y aún cuando no se requiere aumentar las cantidades de
alimento, si es recomendable comer cuando se sienta hambre.
Evitar el consumo de alimentos irritantes o que producen
gases, para evitar los cólicos en el bebé.
Evitar el consumo de alcohol y cafeína, porque pueden
afectar la producción de leche. El alcohol pasa a la leche, por lo que no
se debe tomar bebidas alcohólicas. La cafeína, al igual que el alcohol
pasa a la leche, y puede provocar irritabilidad o hiperactividad en el bebé.
Evitar el tabaco, ya que afecta la producción de leche.
Guías de alimentación y características de la dieta.
La lactancia es el período del ciclo reproductivo de la
mujer, que mas calorías demanda. Es necesario aumentar 500 calorías diarias
para cumplir con la demanda de energía.
Recientes estudios, demuestran que la cantidad de calcio
en la mujer, no se depleta, siempre y cuando la
reserva de calcio de la madre, sea la correcta, sin embargo es
conveniente, cuidar la ingesta de calcio, a través de alimentos, con alto
contenido de este mineral, como lo son la leche y todos sus derivados.
Se recomienda consumir suficientes frutas y
verduras, con alto contenido de vitaminas, puesto el contenido de ellos
en la leche materna, dependerá de las reservas que tenga la madre.
Es conveniente que la dieta sea baja en grasas, para
facilitar su digestión.
Técnicas de amamantamiento.
Es importante que al bebé se le acerque a la madre y se
le ofrezca el pezón desde el primer momento del parto, aún cuando no muestre
interés por mamar. De esta manera, se le podrá ofrecer el pecho
cuando se vean signos de querer mamar. Esperar hasta que llore no es
conveniente, ya que es un signo tardío del hambre.
El estímulo para la producción de leche, es la succión,
por lo que es necesario que se permita al bebé mamar a libre demanda. De esta
manera se producirá la cantidad de leche requerida por el bebé.
Prácticamente todos los problemas con la
lactancia, son causados por una mala técnica de amamantamiento.
A continuación se describe una técnica, propuesta por la
UNICEF. (1)
La madre, se debe de sentar cómoda, con la espalda
apoyada y una almohada en las piernas, apoyando la cabeza del niño sobre el
ángulo del codo. La mama se debe sostener con los dedos en forma de C.
La madre comprime por detrás de la aureola con los dedos
índice y pulgar, para que cuando el niño abra la boca, al estimular el reflejo
de apertura, tocando el pezón con sus labios, ella introduce el pezón y
la aerola en la boca del niño.
Así su lengua masajea los senos lactíferos (que están por debajo de la aerola), contra el paladar
y así extrae la leche sin comprimir el pezón, sin provocar dolor.
El niño enfrenta a la madre, quedando abdomen con
abdomen, quedando la oreja, hombro y cadera, del niño en una misma línea.
Los labios están abiertos, cubriendo toda la aerola. La nariz toca la mama, quiere decir que el niño
está comprimiendo el pezón y no masajeando la aerola.
No hay comentarios:
Publicar un comentario